Los pozos de agua en la CDMX y el conflicto inmobiliario

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Por Aarón Cruz Soto

Ciudad de México.- Las fuentes de agua de la capital vienen de los campos de pozos que equivalían a 0.2 metros cúbicos por segundo, 0.5  del Río Magdalena, 0.5 de la Presa Madín, 0.7 de manantiales y arroyos; de fuentes exteriores 0.6 del Río Cutzamala y de los pozos del Lerma 5.3, hasta los años noventa, según la Sistema de Aguas de la Ciudad de México (Sacmex).

 

Aunque no es la mayoría, estos pozos significan una fuente de agua, aunque una minoritaria, son importantes en la capital. Hasta 2011 la ciudad contaba con 454 pozos de extracción de agua potable autorizados a cargo de Sacmex y hasta 2017 estaban operando los siguientes:

 

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Foto: www.inap.mx

 

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En la alcaldía Benito Juárez hasta 1997 había 22 pozos que daban 65.23 mil metros cúbicos al día, de los mil 142 que la capital consumía, según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).  Antes, en 1994 había 29 que extraían 62.20 mil metros cuadrados por día. Pero en 2015 se extraían 22 mil 50 mil 986 litros en la demarcación, de los cuales un millón 215 mil 166 se utilizaban para actividades industriales, 20 millones 449 mil 601 para uso urbano, 34 mil 560 para uso recreativo y 351 mil 658 para uso comercial.

 

Esta alta demanda de agua ha obligado a que las autoridades perforen más pozos, lo cual ha generado conflictos, por ejemplo en 2017 se construyeron dos pozos de distribución ubicados en la Alberca Olímpica, la colonia General Anaya y un tercero en Tlacoquemecatl, que fue suspendido por la presión de los vecinos que lo rechazaban.

 

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Aunado a esto, la creciente escasez de agua y el aumento de la especulación inmobiliaria ha hecho que vecinos denuncien la situación. Los casos más emblemáticos son las colonias Xoco y General Anaya que se han visto inundadas de desarrollos urbanos que limitan el uso del líquido.

 

En General Anaya se han quejado que parte del pozo Morelos abastece al nuevo complejo Mítikah, ubicado en en Avenida Río Churubusco 601, dejándolos sin agua, temen que dentro de poco no habrá suficiente vital líquido.

 

“Han estado haciendo obras con el drenaje en mi calle Bruno Traven, no sabíamos para qué, pero recientemente el Comité de Vecinos averiguó que al parecer lo que hacen es desviar el agua de un pozo que abastece a la Colonia General Anaya a los edificios que están construyendo en Mítikah”, reportó a DDM-BJ una ciudadana que se siente afectada por esta situación.

 

Por su parte, los habitantes Xoco llevan meses denunciando la falta del vital líquido y la constante compra de pipas a las cuales tienen que recurrir para abastecerse, lo cual implica un gran gasto.

 

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Según comenta Miguel Galicia Muñoz integrante del Movimiento de Unidad y Encuentro Vecinal, el nuevo complejo habitacional vino a complicar más el reparto de agua.

 

“Si preguntas a algún vecino, de plano no hay agua en las tardes, aunque se han hecho algunos cambios: cambiar las tuberías de cuatro pulgadas por tubos de polietileno de alta densidad de 12 pulgadas, eso no ha mejorado”, señaló Miguel Galicia.

 

Muñoz contó que el gasto diario por persona es de 150 litros diarios aproximadamente, según el Reglamento de Construcciones de la capital, pero ahora que llegarán a 50 mil personas se disparará la demanda. Explicó que la zona tiene dos ramales principales: uno por la calle Gabriel Mancera y otro por División del Norte, además, que antes con el pozo Morelos era suficiente para los habitantes del lugar, pero ahora falta el líquido.

 

No es la única zona de la alcaldía Benito Juárez con esta prolemática, en días pasados, vecinos de la colonia De Valle denunciaron falta de agua en sus casa, a pesar de haber hecho sus pagos por el servicio.

 

Tere, vecina del zona, señaló que en su edificio pidió cuatro pipas en menos de una semana.

“Cada una nos cuesta mil 400 pesos y sólo nos duran dos días, yo sólo vivo con mi esposo, pero hay familias aquí de hasta seis integrantes”, apuntó.

 

ACS

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